viernes, 18 de septiembre de 2009





Duerme el tiempo


entre su envoltura de pedernales,


siglos de historia se pierden


bajo la sombra del tiempo...


por claustros


y arcos de medio punto,


ecos lejanos...


rompen el silencio de la noche


entonando cantos gregorianos.


Pies descalzos...


vagan bajo niebla de incienso.


Hiedra abrázalo con fuerza


para proteger tanta belleza...

2 comentarios:

Laury dijo...

Hermoso poema Charo, siemrpe un gusto leerte amiga,te dejo un abrazo y te deseo un buen fin de semana
Lau.

Carlos Augusto Pereyra Martínez dijo...

El silencio...
cómo hiere el silencio
cuando te vas
y el torno
que antes fuera fiesta
se muerde la boca
en su mudez.
Un abrazo Charito.